De la Competición a la Colaboración: Nuevos paradigmas sociales

No es sólo cosa tuya, sí, sí, algo está cambiando, las personas buscamos colaborar, y compartir y cada vez más tendemos hacia una organización más colectiva y menos competitiva. Instituciones, centros, comercios, escuelas, … no deberían permanecer ajenos a esto, sino sumarse “al carro”, a veces hay que innovar y estar dispuesto a pensar diferente y a atreverse a apostar por lo
transformador para adaptarse a la realidad.

El futuro ya no debería ser un ambiente competitivo y hostil, nos gusta el calorcito y por ello se deberían crear climas de aprendizaje común, aumentar la confianza en las demás y en la autodeterminación de las personas. Para avanzar es necesario un impulso colectivo y salir de individualismos, al final, el todo es muchísimo más que la suma de las partes.

En todo el mundo, cada vez más ciudades como Bristol, Seúl o Bolonia, entre otras, son testigo de que gracias a la intervención comunitaria la ciudadanía se está auto-organizando y llevando a cabo iniciativas en conjunto, como monedas sociales, huertos comunitarios, transportes compartidos, redes colaborativas y de intercambio, etc. en cada uno de sus barrios, y no únicamente en aquellos desfavorecidos.

A las personas nos gusta vivir en entornos en los que sentirnos orgullosas, y seguras. Por eso la importancia de fomentar lo colectivo y lo colaborativo, apostando por generar relaciones entre vecinos y vecinas, para lograr que los barrios sean lugares más seguros, agradables y acogedores. En eso se basa El Ganchillo Social, en tejer las redes existentes y generar nuevas pero siempre dando la mayor importancia a las personas como motor de su propio cambio. En incitar la participación y la auto-organización.

Se trata también de compartir, reaprovechar, intercambiar, crear y conectar a las personas de la comunidad, para juntas diseñar los entornos en los que queremos vivir, a través de recuperar algo que se ha ido olvidando como es la relación con los/as vecinos/as. El arte de compartir.

Cambia tu barrio, cambia el mundo.

 

 

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